sábado, 19 de marzo de 2011

Introducción y vocabulario

(así, en plan lección de inglés de academia Opening)


 Antes de comenzar con entradas "en serio", voy a hablaros un poquito de mi (muy poquito; las historias maravillosas tenebroso-erótico-festivas de mi vida tendrán entradas aparte) y, sobre todo, aclarar un poco varios términos que usaré a menudo y que puede que algunos no conozcáis. Dicho esto, comienzo:

 Estooo... eehh... Me llamo Loli y llevo -miro el reloj- once horas sin beber (ahora es cuando todos decís: "Enhorabuena y bienvenida, Loli"). Nah, fuera de coñas (tenéis que ir acostumbrándoos, soy un festival del humor) vamos a ello: me llamo Loli (Lola, Mari Loli, Dolores, María Dolores), tengo 25 años y soy M.I.R. de Psiquiatría. ¿Que qué es eso del MIR? Pues pa eso os he puesto un enlace, cuajones. Ahora mismo soy R1, es decir: residente de primer año. ¿Que por qué Psiquiatría? Pues no tiene mucha historia: con 16-17 años me empezó a llamar la atención dicha materia, no sé a raíz de qué, cómo ni cuándo, sólo sé que me empezó a gustar. Entré en la carrera de Medicina con la idea de hacer esta especialidad, pero durante esos 6 años empezaron a gustarme otras, en realidad un poco de todo, por ello una vez hecho el examen M.I.R. fui a varios hospitales para informarme sobre la residencia de Medicina Interna. Tenía prácticamente decidido escoger esta especialidad cuando, un par de días antes de la elección de plaza, se abrieron las nubes, sonó el Aleluya, un rayo de luz divina iluminó mi mente y me dije que qué c*j*nes hacía yo pensándome nada, que siempre he querido ser psiquiatra y psiquiatra seré (espero). Y nada, cogí mi plaza y en ésas ando, currando/aprendiendo/estudiando a veces para conseguir mi propósito y dominar el mundo convertirme en una buena profesional.
 Total, que recapitulemos y vayamos añadiendo vocablos:

- MIR
- R1, R2... así hasta R5 (aunque mi especialidad es de 4 años).
- Adjunto: es el médico que tiene ya hecha la especialidad.
- Guardias de puerta: son guardias de Urgencias Generales. En mi hospital, los residentes de todas las especialidades pasamos por la puerta, ya sea durante unos meses o durante unos años. En mi caso, tengo que hacer un año y medio de guardias de puerta. Por ahora hago 3 de éstas y 2 propias de especialidad al mes; cuando lleguen los Rs nuevos por mayo-junio (¡oh, ansiado momento!) pasaré a hacer 4 de especialidad y sólo una de puerta. No sé si tengo que aclarar que las guardias de puerta son bastante más quemantes y duras (bueno, lo de duras depende, pero sí que desgastan mucho más). La duración de una guardia es de 17,5 horas en días laborables (de 15:00 a 8:30) y de 24 horas en fines de semana y festivos. El tema de las guardias y, más concretamente, de las Urgencias Generales de un hospital, da mucho que hablar, así que ya le dedicaré una entrada propia.
- Er Varme: el hospital dónde estoy formándome (o deformándome, teniendo en cuenta la comida que nos ponen). Hablando bien y con propiedad, es el Hospital Universitario de Nuestra Señora de Valme. Pero "er varme" es como lo llaman nuestros pacientes, los autóctonos. Y no vamos a llevarles la contraria. Er varme y su área merecen apartado de vocabulario aparte; así, en apenas un año de residencia he aprendido un dialecto nuevo con palabros como "engollipao", "fatiguilla", "estartao", etecé, así como todas las variantes posibles de nombres de fármacos y/o pruebas diagnósticas (burrufreno, paracelamor, abirifi, siprecha, lenzofalograma...).
- Luego, aparte del extenso y rico vocabulario varmero, veréis cómo frecuentemente haré uso de palabras extrañas inventadas o de extraño origen, véase cantenuli, cantiduvi, chachi pilongui, formaciones de verbos con todo lo posible (MIReando, puerteando, psicotizando, ...), y una mezcla de inglés andaluz-español de mediados del siglo XIX.

 Parrafada curiosa que he echado. Iros acostumbrando también. Escribido lo escrito, me despido hasta una próxima y, ya sí, maravillosofilosóficoexistencial de la muerte entrada en este mi new and flamante blog.

Besos, abrazos y palmaditas en el culo.


Foto: er Varme, en todo su esplendor



6 comentarios:

  1. Loli, me encantas; soy fan tuya y hecho de menos la palabra pichigüili en el vocabulario...

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  2. Jajaja, Lara, ya haré una entrada propia para los pichigüilis y su mundo.

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  3. Dicen que uno no escoge psiquiatría, que la psiquiatría le escoge a uno...
    Suerte en este mundo de pichigüilis y pacientes y fármacos y terapias y alegrías y sufrimientos...
    Y suerte en la blogesfera

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  4. Gracias, Miguel. De acuerdo contigo en eso de que esta especialidad le escoge a uno, y no uno a ella.

    Un saludo!

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